- Más de 120 organizaciones de Colombia, Perú y Brasil y Estados Unidos hicieron un llamado a sus gobiernos para poner freno a esta actividad ilegal que pone en peligro la biodiversidad y la vida de las personas.
Con el fin de llamar la atención de los Estados para que enfrenten la minería ilegal en la Amazonía, más de 120 organizaciones de la sociedad civil de países como Colombia, Perú y Brasil y Estados Unidos presentaron una serie de recomendaciones que buscan prevenir y mitigar los daños causados por esta actividad.
Estas recomendaciones de política, presentadas en el evento “Minería ilegal de oro en la Amazonía: delito ambiental transfronterizo”, organizado durante la COP16, reconocen y se alinean a los esfuerzos de los países amazónicos y de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), para detener los efectos de la minería de oro ilegal en la Amazonía, como contribución al cumplimiento de los objetivos del Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal.
Las organizaciones vinculadas a este llamado están agrupadas en la Alianza Amazónica para la Reducción de los Impactos de la Minería de Oro (AARIMO) de Colombia; la Coalición de Responsabilidad Financiera y Transparencia Corporativa (FACT, por sus siglas en inglés), de Estados Unidos; el Instituto Igarapé, de Brasil; y el Observatorio de Minería Ilegal y Actividades Vinculadas en Áreas Claves de Biodiversidad (OMI) de Perú.
En su llamado, insisten en que es crucial agilizar la toma de decisiones a nivel local, transfronterizo e internacional. Estas son las recomendaciones:- Promover la responsabilidad compartida. Las organizaciones recalcan que la minería ilegal no es solo un problema de los países productores, sino que también involucra a las naciones importadoras y los centros financieros que facilitan las ganancias ilícitas. Instan a todos los países a cooperar para erradicar el comercio de oro ilegal.
- Fortalecer la gobernanza transfronteriza. Se propone un Mecanismo de Coordinación Conjunta para reforzar la cooperación en áreas fronterizas vulnerables. También se pide un Sistema de Alertas Tempranas para detectar la minería ilegal antes de que se extienda.
- Acciones colectivas para combatir la contaminación por mercurio. Los pueblos étnicos y comunidades deben participar activamente en la lucha contra la contaminación por mercurio en los ríos amazónicos, con apoyo técnico y recursos adecuados, partiendo de un mayor reconocimiento de su autonomía y derechos territoriales.
- Lucha contra la financiación ilícita. La minería ilegal genera miles de millones de dólares anualmente, lo que financia redes criminales transnacionales. Se requiere una mayor diligencia en la cadena de suministro de oro y el monitoreo financiero para combatir el lavado de dinero vinculado a esta actividad.
- Un marco legal común para el oro amazónico. Se recomienda establecer normas mínimas en los países amazónicos para hacer frente a la minería ilegal y garantizar que se respete la biodiversidad y los derechos humanos en la región.
- Promover un cambio hacia un modelo de desarrollo sostenible. Finalmente, las organizaciones abogan por un cambio hacia un modelo de desarrollo que priorice el bienestar social y la conservación ambiental, ofreciendo alternativas viables a la minería ilegal para las comunidades amazónicas.
Las organizaciones, en este contexto crítico para la protección de la Amazonía, hacen un llamado a la implementación efectiva, integral, diferencial, conjunta y coordinada de las recomendaciones presentadas.
Finalmente, señalan que la colaboración entre gobiernos, los pueblos indígenas, las comunidades, sociedad civil y actores internacionales es fundamental para salvaguardar la biodiversidad y fortalecer los sistemas de gobernanza que protejan los derechos humanos y el medio ambiente.
Debe estar conectado para enviar un comentario.